Frio en Salamanca
La capital del Tormes no sería igual de no ser por la dureza de sus días
invernales y sus últimos días de otoño donde ya hay noches heladoras y días de
niebla.
El frio invierno de
Salamanca arropa a sus gentes con fuertes prendas de vestir que les ayudan a no
abandonar sus transitadas calle y rúas, ni en los días mas desagradables. Si por algo se caracteriza esta ciudad es por
el espíritu que se respira gracias a las fuerzas vitales de los ciudadanos que
la habitan y sus espacios por los que transitan.